7 reglas para ser una persona asertiva

Ni sumisión ni agresividad , Si el equilibrio es la Asertividad. Walter Riso

¿Alguna vez te has preguntado porque dices si, cuando realmente quieres decir No? ¿eres una persona a la que le cuesta trabajo expresar lo que piensas o sientes por miedo al que dirán? ¿has hecho algo que no te agradaba solamente por sentirte presionado por los demás? Si tu respuesta a estas preguntas es si entonces te enfrentas a un problema donde te falta desarrollar una conducta asertiva.

La palabra asertividad hace referencia a la capacidad de expresar los sentimientos, ideas y opiniones de manera libre, clara y respetuosa, comunicándolos en el momento justo y a la persona indicada. Los beneficios de desarrollar esta conducta son muchos entre ellos:

Ser capaz de expresar tus gustos personales e intereses.
Logramos ser tratados con respeto, ser escuchados y tomados en cuenta. También podemos decir no sin que esto genere sentimientos de culpabilidad.
Te da el derecho de equivocarte y cambiar de parecer. Puedes decir con firmeza y sin agresividad un “no sé” o un “no entiendo” sin sentir vergüenza por ello.

Si quieres obtener estos beneficios debes seguir las siguientes 7 reglas para llegar a ser una persona asertiva:

Se claro- evita ambigüedades, es muy importante que digas lo que sientes o piensas en ese momento de una forma clara para que el otro que te escucha pueda estar en el mismo canal, al ser ambiguo das pie a que se interpreten las cosas de forma diferente.
Se conciso: no decores tu discurso tratando de que se escuche bonito lo que quieres decir, hay ocasiones en las que queremos decir que “no” a alguna invitación o no estamos de acuerdo con algún punto de vista y por miedo o pena empezamos a tratar de embellecer nuestro discurso.
se concreto- no le des vuelta al asunto, este punto va de la mano con el anterior tienes que aprender a decir las cosas lo más directas posibles, evítate rodeos que solo aburran a la persona, sal final del día lo que vas a decir si no les agrada a los demás o no están de acuerdo sera de la misma forma aunque trates de darle vueltas al asunto.
se amable: decir lo que piensas y lo que sientas no significa que tengas el derecho de ofender o hacer sentir mal a las personas, así que siempre por más directo que seas mantén la amabilidad al frente.
se coherente: no te contradigas, hay ocasiones que por el miedo que produce decir lo que siento aun sabiendo que los demás no piensan igual nos contradecimos constantemente, un ejemplo es decirle a una persona: “si me gustaría acompañarte pero tengo otras prioridades, pero bueno no es que tu no seas prioridad solo que no tengo ganas de ir, bueno ganas si tengo pero tiempo no”… este es un claro ejemplo de una enorme contradicción, evítalas y siempre mantén la coherencia.
se completo: no omitas información esencial.
se cortés: evita ser agresivo, no grites ni insultes a la persona siempre se muy firme con tus decisiones o pensamientos , defiende tus sentimientos pero sin violentar a los demás.

Si has intentado estos pasos, pero aún así te cuesta trabajo ser una persona asertiva o tiendes a ponerte en el otro extremo de reaccionar agresivamente busca ayuda profesional el tener esa conducta te puede traer serios problemas en tu vida personal, laboral y familiar.

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Si deseas conocer otras técnicas para entrenar la asertividad, te recomendamos el artículo “La ASERTIVIDAD: ¿Sabes decir que NO?“, de la Psicóloga Leticia Rodrigo, una excelente guía para mejorar esta habilidad social.