Resulta complicado para algunas personas vivir día a día recordando alguna situación del pasado, lo que común mente le llamamos “trauma”, ahora visto como “herida emocional”, y es más intenso cuando este ha sido aprendido en una edad en donde no se cuenta con las herramientas suficientes para reflexionar y entender, puede ser el abandono de alguno de los padres, violencia por parte de la familia, promesas no cumplidas de alguien amado, el que no tomaran en cuenta nuestros sentimientos e ideas… estas y muchas más situaciones causan lesiones conocidas como “heridas emocionales” que merecen ser atendida de una forma específica y personal.
Ten presente que no solo tenemos heridas del pasado también poseemos potencializadores, “herramientas”, que ayudaran a sanar esas heridas y que te han conducido hasta este momento ¿Tú sabes cuáles son tus herramientas? El trabajo en el consultorio requiere de amor, comunicación y compromiso para limpiar y transformar esa vivencia en un aprendizaje poderoso que te hará sentir en armonía contigo.
Las heridas emocionales suelen manifestarse de distintas formas depresión, rencor, culpa, ansiedad, actitud defensiva y muchos más, van afectando el día a día impidiendo superar situaciones sencillas, en la toma de acciones o actuar de la mejor manera ante la vida, imposibilitando el estar feliz, convivir con la pareja, familia y amigos, comunicar sin violencia los sentimientos. Como si se cargara con algo muy pesado sobre los hombros o un dolor en el pecho.
A través de la psicoterapia puedes saber lo que ocurrió y lograr hacer algo que ayude a sanar y crecer saludablemente, porqué la vida no solo es dolor,mereces ser feliz y vivir plenamente.